DEA aportó al gobierno de México 23 mil mensajes de texto con pistas del caso Ayotzinapa; evidencian colusión entre autoridades y criminales: NYT
El diario The New York Times (NYT) publicó este sábado que analizó 23 mil mensajes de texto que aportó la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) al gobierno de México con pistas que ayudarían a resolver el caso de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
En el reportaje publicado por el diario estadounidense se muestra como el grupo delictivo Guerreros Unidos estuvo coludido con autoridades de los tres niveles de gobierno para llevar a cabo la desaparición de los 43 normalistas.
Los mensajes de texto obtenidos por el diario relatan que uno de los forenses que trabajaba con el grupo delictivo habría utilizado un crematorio propiedad de su familia para incinerar los cuerpos estudiantes.
“En un testimonio inédito, un integrante del cártel les dijo a las autoridades que los hornos solían usarse para ‘desaparecer gente sin dejar rastro’”, indicó el NYT.
Asimismo, el NYT reiteró que los militares siempre estuvieron monitoreando el secuestro de los normalistas y que nunca acudieron a rescatarlos, ya que estaban recibiendo sobornos por parte del grupo delicuencial.
“Oficiales de inteligencia militar estaban escuchando lo que sucedía. Estaban espiando a un líder del cártel y un comandante de policía que discutían adónde iban a llevar a los estudiantes esa noche”, señaló el medio.
Estos señalamientos coinciden con los hechos por los expertos del GIEI, quienes en julio pasado indicaron que “el músculo del Estado estaba presente, actuaron y no protegieron, saben y sabían lo que pasó. El ocultamiento de esa información se ha constituido en sí mismo en una responsabilidad del Estado”.
“Todos colaboraron para desaparecerlos”, acusó Carlos Beristain en esa ocasión.
El diario neoyorkino indica en su reportaje, además, que “el Ejército tuvo conocimiento de la ubicación de dos sospechosos que discutían la liberación de los estudiantes quienes, según los investigadores, tal vez aún estaban con vida”.
El NYT reiteró los señalamientos sobre que Guerreros Unidos les pagaba a algunos agentes de la policía para recibir protección.
El medio estadounidense también destacó cómo la esposa del un líder de Guerreros Unidos amenazó a un traficante de drogas, tras no tenerle confianza de pasar la droga a los Estados Unidos, con ser el número 44 refiriéndose a los 43 estudiantes. (Latinus).