Por: Dr. Rafael Aguirre Cardoza*
Sin lugar a dudas que este año 2020 la celebración que de antaño hacemos los mexicanos respecto al día de muertos será completamente diferente. Mientras que en la mayoría de los hogares esta festividad es toda una tradición ancestral, en otros hogares será celebrada por vez primera.
Mucho se ha comentado que esta pandemia por COVID 19 ha mostrado la verdadera cara de la sociedad y es que mientras la mayoría de las personas se han levantado por su propia voluntad el resguardo de sus domicilios y han salido a la calle a encontrarse cara a cara con el virus COVID 19, ya que no aguantan más seguir cuidando su salud lejos del alcance de las aglomeraciones sociales, otros se sortean la vida atendiendo a los enfermos en muchos hospitales del país, mismos enfermos que como siempre hicieron caso omiso a las recomendaciones de las autoridades sanitarias y se olvidaron por mucho del uso del cubrebocas, del gel antibacterial, de las caretas faciales protectoras y de no acudir a lugares concurridos, total ya se habían aburrido de estar en casa cuidando su salud.
Por si esto fuera poco, en entregas anteriores he comentado que la sociedad en general no está ayudando ni colaborando con el personal de salud que hoy más que nunca se encuentra muy agotado tanto física como mentalmente y es que han sido ocho meses de lucha incansable en contra del COVID 19, pero no solo de esto, si no de intentar sin logarlo, hacer entender a las personas que este virus en muchos casos puede ser letal y acabar con la vida de muchas personas en poco tiempo. En fin, se ha sembrado en terreno árido y tristemente hoy lo podemos corroborar.
Es ofensivo, para toda aquella persona consciente, que en pleno rebrote de este fatal y trágico problema de salud como lo es el COVID 19, que el centro histórico de la ciudad capital de Xalapa, Veracruz en días pasados haya permanecido cerrado debido a la presentación del festival de bandas y peor aún, que se haya permitido la presentación del rapero “Alemán” en un conocido café del centro de la ciudad y que haciendo alarde del desorden y la falta de conciencia, algunos medios de comunicación presentaran la noticia como algo fuera de serie y único en su estilo, cuando a todas luces publicaron ellos mismos las fotografías de cientos de jóvenes en prácticamente una trifulca y arrebato por conseguir un autógrafo de este artista. ¿La pregunta es, y quien es responsable de este desorden? ¿Por qué se autoriza un evento masivo cuando estamos en semáforo naranja?
Las respuestas seguramente usted ya las está contemplando y más seguro aún, ya hizo responsable a quien su sano juicio y conciencia deben estar señalando como los orquestadores de este total desorden y falta de conciencia y responsabilidad para llevar a más familias la desgracia de perder a uno o a varios de sus miembros.
¿Qué viene después? Culpar al de enfrente, eso lo sabemos hacer muy bien y como todo al final del camino, nadie asume su propia responsabilidad ante hechos que incluso son un atentado contra la vida humana.
Muy seguramente para cuando eso ocurra, esos mismos medios de comunicación, pero ahora a ocho columnas publicarán que – los muertos por COVID 19 siguen en aumento- que la autoridad sanitaria es incompetente para continuar llevando el curso de esta pandemia- y que la política de salud del actual gobierno ha fracasado, y aunque le parezca tendencioso así seguramente se publicará.
Después de tanto, pues que más da, hoy en nuestra ciudad como en todo México estamos celebrando y recordando a nuestros difuntos, por eso en muchos hogares por vez primera y como consecuencia de la pandemia por COVID 19 debutarán las familias colocando un altar, pero para muchas otras, esto no es suficiente y requieren seguir buscando a la muerte en las calles hasta encontrarla, talvez por ese deseo ferviente de competir con los vecinos y saber qué altar fue mejor confeccionado por que si se culpa a la ignorancia, ni la misma muerte se los podrá creer.
Un grato y bonito recuerdo, así como mis oraciones para todos mis colegas, médicos, enfermeras, personal de salud en general que han fallecido por intentar cuidar la vida de otras personas sin apenas poderlo lograr. Ojalá no haya más familias que debuten confeccionando un altar en estos días de muertos por causas de la pandemia por COVID 19.
*Doctor Rafael Aguirre Cardoza es Gastroenterólogo endoscopista.